10 mar 2013

S O Y



Soy hija de la noche,
esclava de algunos recuerdos,
amiga del tiempo silente
que mágicamente 
acaricia y envuelve.
Cómplice de algunos sueños
y testigo de cómo pocos se realizan.

No tengo mañanas con desayuno
en la mesa, un beso de despedida
en la puerta y tampoco un
paraguas que me proteja.

En mi mundo sólo hay frío, 
intenso frío
que me acompaña con una taza
de té de hierbas,
mientras el tiempo se encarga
 de borrar de mi memoria
la dulzura que un día
hubo en mi.